Muchas son las investigaciones que se han realizado sobre las ventajas que tiene para los niños criarse con perros. Además de ser bueno para su salud, ya que minimiza el riesgo de padecer asma, les aporta una serie de beneficios emocionales y les ofrece la posibilidad de vivir grandes momentos junto a ellos.
En ocasiones, una familia tiene antes al perro que un bebé y es normal que surjan dudas sobre la relación entre ambos cuando llegue el momento de la convivencia. Por eso, desde la Clínica Veterinaria Molino de la Hoz queremos darte los mejores consejos para que la adaptación se realice de forma adecuada. Preparar a tu perro para la llegada del bebé será bueno para toda la familia.
Comienza a prepararle durante el embarazo
La llegada de un bebé a casa supone un cambio radical en los hábitos y rutinas de una familia, incluido en los de tu perro. Tu mascota también deberá adaptarse a la nueva situación.
Según los expertos, la adaptación se tiene que realizar poco a poco y lo indicado es que se comience en los meses de embarazo. De esta forma, se logra que el perro no asocie un cambio brusco en su vida con la llegada del nuevo miembro de la familia.
Una cosa que hay que tener en cuenta es que no todos los animales responderán de la misma forma ni se adaptarán igual. Si tu mascota es obediente y se comporta bien en casa y en sus paseos, no necesitarás trabajar mucho con él antes de la llegada del bebé. Sin embargo, si tienes un perro nervioso que muestra algún problema de conducta, puede ser interesante que hables con tu veterinario o con un educador canino.
También es importante analizar si tu perro tiene algunos comportamientos que quieres evitar cuando llegue el bebé. Por ejemplo, si tu perro duerme en tu cama y quieres evitarlo tras el nacimiento, no esperes a que se produzca el acontecimiento para cambiar la situación.
Algunos perros son muy efusivos cuando saludan a la gente, sobre todo si se trata de sus dueños. Piensa en lo que ocurrirá cuando el volumen de la barriga aumente, cuando le presentes al bebé o cuando el niño comience a dar sus primeros pasos. En ocasiones no le damos importancia a este comportamiento, pero puede ser peligroso ya que podría lastimar al pequeño sin querer.
Pese a que es difícil saber cómo van a cambiar los horarios cuando nazca el bebé, debes tener en cuenta que muchas de las cosas que haces con tu perro no van a poder seguir siendo como siempre. Si tu perro es muy nervioso, intenta no reducir los tiempos de sus paseos. Si por cuestión de tiempo fuera incompatible, una buena opción durante las primeras semanas puede ser contratar a un paseador. Es normal que tu y tu pareja estéis volcados con el cuidado del bebé, pero el animal no debe sufrir las consecuencias de una falta de actividad.
Es el momento de que, si tu perro no tiene su espacio, como una cama propia, comience a tenerlo. Este lugar debe ser respetado en todo momento, incluso por el bebé.
En cuanto a los cuidados de tu mascota, la desparasitación es fundamental para protegerla de enfermedades y asegurar que no trae garrapatas u otro tipo de bichos a casa. Siempre debes desparasitar a tu mascota, pero, además, si va a llegar un recién nacido a casa esta necesidad se multiplica.
Enséñale a tu perro algunas novedades
Según vayas comprando accesorios y ropa para el bebé, sería conveniente que tu perro pudiera ir familiarizándose con todas esas novedades.
Tu mascota se enfrentará a nuevos olores, por lo que es recomendable que entre en la habitación del bebé y olfatee sus cosas. También puedes dejarle oler los geles, cremas o perfumes destinados al pequeño. De esta forma, cuando el niño llegue a casa tu perro ya estará familiarizado con el olor. Lo mismo le ocurrirá con los nuevos sonidos, como gritos infantiles, llanto o balbuceos. Puedes ponerle vídeos en internet.
Además, cuando el bebé nazca, una gran cantidad de juguetes, mordedores, sonajeros y pelotas invadirán tu casa. A tu perro puede resultarle muy apetecible la idea de morder esos juguetes. Comienza a acostumbrar a tu mascota a los juguetes del bebé y no permitas que los coja. Si muerde el del bebé, sustitúyelo de inmediato por uno de los suyos para que acabe comprendiendo los que le corresponden y los que no.
Cuando le presentes al bebé
Cuando llegues a casa del hospital acaricia en primer lugar a tu perro, que estará deseando verte y después lleva a cabo la presentación en un ambiente relajado. Si tu perro está nervioso es preferible posponer el momento.
Deja que tu perro olfatee a tu bebé durante unos segundos, mientras le acaricias y le hablas con suavidad. Si tu mascota se muestra tranquila en presencial del pequeño, ve alargando el tiempo de sus encuentros. Recuerda que esto debe hacerse siempre en presencia de adultos que vigilen constantemente al perro y al bebé.
Desde la Clínica Veterinaria Molino de la Hoz esperamos que este artículo os haya servido para saber cómo gestionar la situación y hacer el proceso lo más sencillo para toda la familia. Si necesitas más información sobre este tema o tienes cualquier otra duda, ponte en contacto con nosotros o visítanos en nuestra clínica en Las Rozas. Estaremos encantados de atenderte.
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